Una cama de hospital es un dispositivo de cuidado adaptado a las necesidades de los pacientes cuyo estado de salud requiere largos períodos de reposo en cama o reduce su movilidad. Estas camas médicas son muy esenciales para que las personas enfermas, discapacitadas o de edad avanzada puedan entrar y salir de la cama con seguridad, para que los cuidadores realicen los cuidados con menos esfuerzo y para reducir así el riesgo de caídas. La altura de la cama puede ajustarse para facilitar las transferencias y evitar el dolor de espalda de los cuidadores. Para satisfacer las necesidades de todos, existen diferentes modelos y funciones.
Características y ventajas de utilizar una cama de hospital
Las camas son muy importantes para los pacientes encamados y también para los cuidadores, ya que ofrecen más ventajas que las camas normales. Maximizan el confort del paciente, facilitan el ajuste de varias partes de la cama.
Ayudar mejor a los pacientes a cambiar de posición
Cuando las personas se tumban en una cama durante mucho tiempo, la presión de la cama hace que el tejido de la piel quede atrapado entre los huesos y la superficie de la cama, lo que provoca acné. Para evitar estos problemas, las camas médicas ofrecen una solución eficaz, ya que permiten al usuario ajustar la posición de la cama según sus necesidades.
Mejora de la circulación sanguínea
Las camas de hospital permiten a los usuarios colocar mejor la cabeza y los pies y cambiar de posición según sea necesario. Estos cambios, especialmente en los puntos de presión del cuerpo, ayudan a mejorar la circulación sanguínea del paciente mientras está en la cama.
Proporciona seguridad a los pacientes
La cama de hospital ofrece mayor seguridad al paciente, especialmente a los que corren riesgo de caerse, gracias a la existencia de barandillas en las camas de hospital que reducen el riesgo de fracturas por caídas.
Conveniente para el traslado de pacientes
Las camas de hospital permiten a los pacientes sentarse y levantarse de la cama con facilidad, especialmente a las personas con problemas de cadera y rodilla, ayudándoles a levantarse de forma cómoda y segura.
Además, las camas de hospital ofrecen a los usuarios una amplia gama de opciones en el tipo de cama de hospital. El usuario puede elegir entre una cama manual o una eléctrica, en función de sus condiciones y del tiempo que pase en el hospital.
La cama se compone generalmente de un bastidor, un cabecero fijo, un piecero, un respaldo, un mando a distancia, ruedas silenciosas en general y accesorios estándar como: porta suero, ganchos de drenaje, barreras de protección….
Permiten el acceso a los cuidados en buenas condiciones de seguridad, estabilidad y comodidad para el paciente y el cuidador.
Tipos de camas hospitalarias
Se pueden encontrar camas de hospital con diferentes modelos. Es posible tener dos superficies para dormir, de modo que una mitad de la cama no cause molestias al ocupante de la otra mitad. Por ejemplo, hay camas para enfermos de Alzheimer con una barrera para facilitar la salida de la cama y proteger al paciente de las caídas. Además, algunos modelos están diseñados para niños con dimensiones más pequeñas.
Cama eléctrica
La cama de hospital básica moderna se llama cama eléctrica. Estas son las camas más frecuentes en los grandes hospitales de ciudad. Las opciones de subida y bajada de la cama se seleccionan mediante los botones de las barandillas laterales. Los propios pacientes pueden ajustar la posición de su cama, a diferencia de las enfermeras o los auxiliares de enfermería certificados que ajustan la posición manualmente.
Camas bajas
Las camas bajas están especialmente diseñadas para los pacientes que pueden caerse de la cama y provocar lesiones, a pesar de la sujeción de las barandillas laterales. Las camas bajas se colocan a una altura de unos 20 cm hasta 60cm del suelo en la posición más alta. Algunos modelos de cama tienen un ajuste de maniobra alto/bajo, pero la mayoría de las camas son simplemente bajas hasta el suelo, con la única opción de subir o bajar la cabecera y los pies de la cama.
Camillas
Los tipos de camas que se ven en la sala de urgencias de un hospital suelen ser camillas. Estas camas están diseñadas para la movilidad. Si una persona necesita llamar desde otro lugar, estas camas pueden trasladarse fácilmente de su casa a la ambulancia, del quirófano a la unidad de emergencias, gracias a sus características especiales, como las patas plegables.
Cama de escotilla
La cama escotilla tiene una larga historia de uso en los hospitales. Es más frecuente verlas en residencias de ancianos y en zonas alejadas que tienen dificultades económicas y utilizan estas camas porque no necesitan electricidad. Tienen tres manivelas a los pies de la cama bajo el colchón. Una manivela sube y baja toda la cama, otra manivela sube y baja la cabecera de la cama y la última manivela sube y baja los pies de la cama.
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